Guía de supervivencia para el verano
Para los amantes del deporte al aire libre u otras actividades, considera estas recomendaciones para evitar los riesgos de la exposición excesiva al sol.
El verano ha llegado a Montemorelos y con él, la oportunidad de disfrutar de nuestro hermoso campus realizando actividades al aire libre. En la Universidad de Montemorelos, promovemos la actividad física como parte esencial del cuidado integral, y nuestro campus es el lugar perfecto para ejercitarse, ya sea corriendo, jugando fútbol, andando en bicicleta o simplemente paseando. Sin embargo, con las altas temperaturas y la intensa radiación solar, es crucial tomar medidas para proteger nuestra piel. Aquí te presentamos una guía de supervivencia para deportistas al aire libre que te ayudará a disfrutar del verano de manera saludable.
1. Uso de ropa con protección UV
Una de las maneras más efectivas de proteger tu piel del sol es utilizando ropa diseñada específicamente para bloquear los rayos ultravioleta (UV). La ropa con protección UV tiene tejidos especiales que reducen la penetración de los rayos solares. Busca camisetas, pantalones, gorras y gafas con etiquetas que indiquen su nivel de protección UV. Además, opta por colores oscuros o brillantes que absorben más radiación UV que los tonos claros, y por tanto protegen más tu piel.
2. Aplicación adecuada del protector solar
El protector solar es tu mejor aliado contra las quemaduras solares y el envejecimiento prematuro de la piel. Para maximizar su eficacia:
- Elige un protector solar de amplio espectro: Asegúrate de que proteja contra los rayos UVA y UVB.
- Usa un factor de protección solar (FPS) de al menos 30: Esto es especialmente importante si pasarás mucho tiempo al aire libre.
- Aplica una cantidad generosa: Una cantidad insuficiente reduce significativamente la eficacia del protector.
- Vuela a aplicar cada dos horas: O después de sudar en exceso o nadar.
3. Productos resistentes al agua y al sudor
Cuando realizas actividades físicas intensas, es probable que sudes bastante. Por ello, es fundamental usar un protector solar resistente al agua y al sudor. Estos productos están formulados para mantenerse en la piel incluso cuando estás sudando o en contacto con el agua, proporcionando una protección más duradera.
4. Protección de áreas olvidadas
Al aplicar protector solar, es fácil olvidar áreas pequeñas pero importantes:
- Labios: Usa un bálsamo labial con protección solar.
- Orejas y cuello: Estas áreas suelen quedar expuestas y deben ser protegidas. Cúbrelas o por lo menos aplica protector solar en ellas.
- Cuero cabelludo: Si tienes el cabello fino o partes del cuero cabelludo expuestas, considera usar una gorra o aplicarte protector solar en esas áreas.
5. Hidratación de la piel
El sol y el ejercicio pueden deshidratar tu piel rápidamente. Mantén tu piel hidratada bebiendo abundante agua durante y después del ejercicio. Además, usa una crema hidratante después de ducharte para ayudar a reponer la humedad perdida.
6. Horas adecuadas
Para minimizar los riesgos de la exposición solar, es fundamental elegir las horas más adecuadas para hacer ejercicio u otras actividades al aire libre:
Temprano: Las horas alrededor del amanecer, antes de las 10 de la mañana, son ideales ya que la intensidad de los rayos solares es menor.
Al atardecer: Después de las 5 de la tarde, el sol es menos fuerte y el calor ha disminuido, lo que las hace horas apropiadas para el ejercicio.
Evita las horas de sol intenso: Entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, los rayos UV son más intensos y el riesgo de daño a la piel es mayor. Si es posible, programa tus actividades físicas fuera de este período.
7. Cuidado posterior a la exposición solar
Después de un día al aire libre, es importante cuidar tu piel para reparar cualquier daño causado por la exposición al sol. Usa productos post-solares que contengan ingredientes calmantes como aloe vera o caléndula. Estos ayudarán a reducir la inflamación y a mantener tu piel saludable.
En la Universidad de Montemorelos, valoramos la salud integral y sabemos que la actividad física es esencial para mantener un estilo de vida saludable. Sin embargo, también es crucial proteger nuestra piel de los efectos nocivos del sol. Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de cualquier actividad al aire libre en nuestro campus o donde te encuentres, mientras mantienes tu piel segura y saludable. ¡Disfruta del verano y cuida tu piel!
Editora: Brenda Cerón.
